cansada... cansadita... desganada
es que el mundo gira, sigue y persigue y no me pregunta si quiero seguir, si me gusta el ritmo al que va mi vida, si hay suficiente inspiración, si hay alegría. en realidad, ya nadie se pregunta esas cosas, ya nadie se pregunta nada, ya a nadie le importa que le pasa -verdaderamente- al de al lado. eso me enferma, me entristece, me pudre... lenta y dolorosamente. ¿qué pasa en este mundo que la gente no se inmuta por nada? ¿qué pasa en esta tierra donde ya nadie se detiene a pensar, a cuestionar? y no hay respuestas y no hay descanso... pobre humanidad que no aprende.
no estoy en un estado muy pro activo que digamos. me detesto fervientemente cada mañana, situación que no mejora al pasar el día. espero que esto sea como Agosto, despertarme y que esto pase... si no... no sé...
sólo sé que aún debo terminar mi obra cúlmine. y debo ir a parís y debo abrazar a la Paula todos los días que pueda (hermosa mi prima...).
sin ganas de mandar saludos... que si el mundo hoy me da la espalda, no espere que siga rogando y esperando por él.
Fran
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